Deuda pendiente



Una vez más
la centésima parte de mis versos
recorren en sólo treinta y siete segundos
la distancia entre tu lado y el mío,
ganando dolor al viento amargo
que los nutre.
Entre cielo y cielo viaja
solitario
el ruido de tripas,
condenado al eco infinito
de un adiós, parecido
al del beso último
que me regaló tu llanto
convirtiéndote
en olvido.


© Beatriz Morín


2 comentarios:

  1. Es la primera vez que entro en el blog y tu estilo de escritura me reconfortó, es que esta noche entré en muchos blogs y realmente salí espantado y te comunico algo, tenes un admirador mas de los tantos que debes tener, un beso niña.

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    1. Hola Rubén... no había visto tu comentario... creo que el primero que recibe este blog... Gracias por tu paseo en solitario por el mundo de mis letras...

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